Me está pasando a menudo.
Llega la noche, mis persianas se cierran, exhaustas y felices. Todo se torna quietud. Todo es válido, extraño y espontáneo. Comienzo a soñar.
Y al día siguiente solo recuerdo (porque algunos sueños sí se recuerdan) haber estado soñando con las cosas que tenía que hacer para el día presente. Por ejemplo, hoy me levanté y había "soñado" o pensado durante toda la noche y con los ojos cerrados, sobre una reunión que tenía con alguien de la univ. Prendo mi laptop y me topo con la cancelada vía e-mail de esta reunión, por la persona en la que he estado soñando / pensando toda mi madrugada de jueves. Facil ella también soñó con la reunión y siente que ya no tiene nada más que decirme.
julio 24, 2008
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2 comentarios:
Te puedo preguntar por la lotería!!!
Jajaja felizmente yo no sueño, bueno no me acuerdo de mis sueños, así mis noches son mas tranquilas.
Nos leemos.
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